La salvaguardia de los ecosistemas marinos es una prioridad en la apuesta de China por el desarrollo sostenible de alta calidad. Estos ecosistemas que desempeñan un rol vital en la conservación del equilibrio ecológico y la biodiversidad en los mares de la Tierra. Un grupo de investigadores chinos ha desarrollado un robot biomimético que se asemeja a una mantarraya para la protección de estos ecosistemas en el mar Meridional de China.
El científico Qu Yilin asegura que en la investigación sobre el desarrollo de peces biomiméticos se encuentran muchas especies de las cuales se puede aprender, cada una con sus características distintivas. Qu describe cómo una mantarraya puede nadar hacia adelante y hacia atrás, realizar giros cerrados, sumergirse e incluso hacer volteretas hacia atrás. Por ello, considera que, por su estabilidad y flexibilidad, ha sido la mejor de todos los ejemplares que se han estudiado.
El robot puede desempeñar un papel clave en muchos escenarios. Por ejemplo, en la monitorización y protección de los arrecifes de coral. Tiene una estructura flexible y se mueve prácticamente de la misma manera que una mantarraya real.
Qu afirma que cuando entra en contacto con los peces, estos no se sienten perturbados, lo que permite monitorear su estado de salud y que como es altamente maniobrable, puede trabajar en condiciones submarinas adversas y junto a equipos complejos para llevar a cabo la monitorización hidrológica, recopilar datos, etc.
El proceso de fabricación y perfeccionamiento de este robot biomimético ha abierto múltiples posibilidades en nuevos campos interdisciplinarios, que pueden conducir al desarrollo de más vehículos submarinos y otras áreas de estudio.
Qu considera que vivimos en una era con herramientas de investigación excelentes y un gran número de aristas para realizar investigaciones, y concluye que existe un amplio margen para explorar, inventar y crear.
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