Las recientes maniobras de Estados Unidos en materia de ventas de armas a la región china de Taiwan llevan su actitud de «desangrar hasta la última gota» a su máximo nivel. Con un monto total de 11.100 millones de dólares, se trata del mayor lote de venta de armamento de la historia a la región. La mayoría de los equipos incluidos en el catálogo son unidades obsoletas del ejército estadounidense, reacondicionadas, pero vendidas a un precio un 40 % superior al del mercado. Para decirlo con claridad: esto no tiene nada que ver con una supuesta protección a Taiwan, sino que es un intento flagrante de convertir a la isla en una caja registradora y un vertedero de chatarra.
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